Una crisis es un cambio brusco o una modificación importante en el desarrollo de algún suceso, y ésta puede ser tanto física como simbólica. Crisis también es una situación complicada o de escasez.
La palabra crisis viene de griego “krisis” y a su vez este del verbo “krinein” que equivale a separar o decidir; este es un vocablo que en nuestro idioma posee varios significados. Se entiende por crisis, el súbito cambio o alteración de suma importancia en el desarrollo o progreso de algún hecho o acontecimiento, y esta alteración puede ser física o metafórica.
Una crisis ecológica, crisis ambiental o crisis medioambiental, ocurre cuando el ambiente de una especie o de una población sufre cambios críticos que desestabilizan su continuidad. Existen muchas posibles causas, tales como: un cambio abiótico (por ejemplo, incremento de la temperatura o bajo nivel de lluvias), la presión de la depredación o la sobrepoblación. En cualquiera de esos casos se produce la degradación de la calidad del ambiente en relación con las necesidades de la especie que lo habita.
Trabajar por un medio equilibrado y por un desarrollo comedido y sostenible, debería ser un punto de encuentro para toda la humanidad. Los daños ambientales no conocen fronteras, mostrándonos, una y otra vez, la cruda realidad de un mundo dolorosamente dividido por la pobreza, al responder a ellos con mejores o peores instrumentos, según la categoría económica del país. Trabajar por la justicia contempla de una manera inseparable la variable ambiental por cuanto no puede una parte del mundo perjudicar a las demás –especialmente las más débiles y vulnerables– ni a las generaciones venideras.
Para actuar dentro de este contexto es necesario hacerlo en tres niveles: institucional, social y personal. El primero es consecuencia del carácter global de los impactos y requiere el concurso de todos los países para su resolución. Naturalmente, las responsabilidades no son las mismas, por lo que los países más involucrados deben correr con las principales medidas de contención. Los países emergentes también deben implicarse, pues las emisiones atmosféricas de algunos, como China o India, superan ya a bastantes países occidentales. En estas áreas no debiera darse un crecimiento imitativo, pues si es cierto que la demanda de energía supera al crecimiento de la población, y que para el año 2050 seremos 9.000 millones de personas, los combustibles fósiles y minerales tienen un horizonte muy cercano, por lo que debieran proponerse respuestas sostenibles que estuvieran sustentadas en las energías renovables.
Dentro de este nivel pueden contemplarse protocolos internacionales, como Kioto (cambio climático) o Montreal (capa de ozono) –tan alejados en sus resultados uno de otro– así como convenios no tan conocidos, como CITES (tráfico ilegal de especies) o RAMSAR (protección de zonas húmedas), pero igualmente importantes. Asimismo, la legislación (más de 250 Normativas ambientales en la Unión Europea) es un importante referente para ordenar la actividad la actividad económica y el desarrollo.
Fuentes:
https://conceptodefinicion.de/crisis/
https://es.wikipedia.org/wiki/Crisis_ecol%C3%B3gica
Roberto Real de León Julia Vargas Rubio Marco Antonio Flores Enríquez
Estudio de Arqué Poética y Visualística Prospectiva
Departamento de Investigación y Conocimiento del Diseño